Las piezas son parte de un proceso en su obra gráfica (1968 a 1999 y 1999 a 2018)
Rocío Flores
OAXACA, Oax. Francisco Toledo inaugura el próximo 17 de agosto la exposición Gráfica, una mini retrospectiva de la obra que trabajó en los talleres de Mario Reyes en la Ciudad de México de 1968 a 1999 y Fernando Sandoval en Oaxaca de 1999 a 2018.
La muestra se exhibirá en la ciudad de Puebla, en el Museo Taller Erasto Cortés (MUTEC). En entrevista el fundador del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) compartió algo sobre esa experiencia en los talleres del grabador, pintor y escultor mexicano Mario Reyes, quien guardó en su archivo todas las pruebas de estado.
“En la exposición podrán ver todas mis indecisiones, las búsquedas de color, la primera impresión del dibujo a pura línea, lo que se trabaja aparte para hacer las manchas a color y así se darán cuenta que la edición definitiva muchas veces no tiene que ver con las pruebas que se presentan”, comentó el pintor de origen zapoteca.
Él consiguió las obras gracias a Cándida Fernández y Ana Diego de Fomento Cultural Banamex, quienes encontraron en Mérida a la viuda Teresa Vásquez, Toledo llegó a un arreglo con ella para ceder las piezas a la Colección Toledo/INBA.
La otra parte de la exposición corresponde a las piezas que ha trabajado en el taller de Fernando Sandoval. Ahí están las series más recientes sobre los temblores que afectaron el Istmo de Tehuantepec en septiembre de 2017 y también hay algunos autorretratos.
Toledo comentó que en la época en que empezó a trabajar con Mario Reyes en México la gráfica no tenía la difusión que tiene ahora en galerías.
“Cuando yo estaba en México, en los setentas u ochentas no se vendía la gráfica, los únicos que vendían eran Rufino Tamayo y José Luis Cuevas, salían a Nueva York y Francia, ahí trabajaban en los talleres y traían sus copias a México, ellos preferían hacer litografía y su obra se vendía muy bien, fuera de ellos no circulaba mucho la obra gráfica”
“Al Taller de la Gráfica Popular nunca le interesó comercializar lo que hacía, solo buscaban difundir un mensaje político, no buscaban vivir de eso”, agregó.
El artista contó que en ese tiempo hizo algunos libros como el Chilam Balam, La iguana y Trece maneras de mirar a un mirlo, los cuales fueron editados por la Galería Arvil y quizá también la Galería López Quiroga.
En aquellos años en el taller de Mario Reyes, hicieron la serie Indios remisos, con placas con las que habían hecho grabados de imágenes religiosas. Más tarde Carlos Monsiváis publicó Nuevo catecismo para indios remisos, basado en la obra del artista.
Pintor-dibujante
El artista tiene una gran producción en obra gráfica, él se define como pintor- dibujante.
Durante la entrevista explicó que hay pintores-pintores y hay pintores-dibujantes. Citó como ejemplo de pintor-pintor a Rufino Tamayo; y pintor-dibujante a José Clemente Orozco.
“Durero es un pintor-dibujante, tiene mucha gráfica, pero en su pintura se ve que predomina de cierto modo el dibujo, antes que el color. Creo que yo soy un pintor- dibujante” indicó el fundador de grandes espacios culturales en Oaxaca.
[quote]“Creo que en mi caso mis mejores grabados son en blanco y negro pero también me interesa el color.[/quote]
Toledo tiene una formación gráfica desde temprana edad cuando llegó a estudiar a Oaxaca en 1953 a la Escuela de Bellas Artes y en 1955, a la edad de 15 años, entró al taller de grabado de Arturo García Bustos, continuó en la Escuela de Diseño y Artesanías en la Ciudadela en la Ciudad de México, después en París hizo litografía y a su regreso continuó con el grabado en madera y metal. He hecho cerámica, objetos, dibujos, pinturas y acuarelas, dice que es un pintor que ha hecho un poco de todo.