Un espacio para el arte, el juego y la lectura para la primera infancia
Rocío Flores
Una huella de la infancia y el hallazgo de un libro de la escritora Graciela Montes, orientó a Xochitl Ortiz Molina en su formación como promotora y mediadora de la lectura infantil y juvenil en Oaxaca.
Leía varios libros teóricos cuando se encontró con un ensayo de la escritora argentina, en el que relata las experiencias con su abuela y las va entrelazando con las aportaciones de algunos filósofos. A partir de ahí reflexiona sobre lo que ocurre con nuestras experiencias al compartir historias.
“Sus piernas eran pesadas, decía la autora cuando la describía… ¡Casi me voy de espaldas por la forma que me nombraba! Me veía ahí porque ella se retrata como niña y me hacía recordar imágenes. Mi abuela tiene un problema de varices desde que era muy joven, que se agudizó ahora a sus 90 años. Podía verla recostada y a mi hermana tirada en el piso por el calor.
Ambas pasábamos las tardes bajo su hamaca mientras nos contaba cómo conoció a mi abuelo y otras anécdotas. Un día, de esa forma en que los niños miran y dicen las cosas, yo supe que mi abuela no era feliz, pero esos momentos en los que compartía con nosotras hasta el semblante le cambiaba”, relata mientras un hilo líquido se desliza por su rostro alargado.
Ahora lo hacemos a través de los libros 一retoma一 pero antes se hacía con la tradición oral. Quince años después Xóchitl recupera ese momento y recuerda que a esa autora argentina le debe el haber tomado conciencia de cómo nos transformamos a partir de compartir historias y también el nombre de su nuevo proyecto al que nombró La Casa Imaginaria.
Fundadora de la bebeteca en la BS biblioteca infantil de Oaxaca, con un poco más de 10 años de experiencia en el tema de la primera infancia, Xóchitl resume como Graciela Montes le hizo entender que las personas adultas somos responsables del malestar o bienestar de la infancia y no solo de manera personal 一refiriéndose a quienes tienen hijas e hijos一 sino que, dado los tiempos que nos ha tocado vivir, también de manera global.
“Yo asumí mi responsabilidad desde este ámbito, de compartir historias, sobre todo porque nos cuestionan cómo nos relacionamos desde nuestra situación de privilegio desde el mundo adulto”, asegura Xóchitl, Totil, Tochitl, Tuti, o Bochil como le han llamado los pequeños con quienes ha compartido una infinidad de nombres, cuentos, leyendas, su tiempo y su vida en ese periodo.
Después de varios años de gestación, Xóchitl construyó ese lugar para compartir y construir la historia particular de cada de niña o niño que se irá abriendo un mundo a través de la palabra, el lenguaje y la literatura.
Este martes abre La Casa Imaginaria, un espacio dedicado al arte, el juego y la lectura para la primera infancia, es decir niños y niñas de entre 0 y 6 años. En palabras de la promotora «es un lugar en el que se trabajará a nivel de piso”. También se ofrecerán asesorías y acompañamiento a personas en el tema educativo y cultural.
Las actividades inician este 2 de abril a partir de las cinco de la tarde en Jazmines 218, Col Reforma. Para mayor información puede llamar al Tel 951 248 09 72 o visitar la página de Facebook e Instagram: La Casa Imaginaria.