Homenaje a Tamayo, un oaxaqueño íntegro

_{Fotografía: Carmen Pacheco}

En la capital del estado 30 artistas rinden homenaje al artista oaxaqueño Rufino Tamayo al cumplirse 30 años de su partida.

Tamayo fue uno de los pintores oaxaqueños más reconocidos a nivel mundial. De acuerdo con especialistas en arte, logró conjugar el legado del arte prehispánico con las vanguardias internacionales en piezas únicas marcadas por el color, la perspectiva, la textura y la armonía.

Su biógrafa, la periodista cultural Ingrid Suckaer lo describe como un gran artista, íntegro, no solo en el sentido estético y moral sino también espiritual.

Pero sobre todo, “fue un ser humano que se caracterizó por su generosidad”, según la curadora y promotora de arte Nancy Mayagoitia, quien organizó en la ciudad de Oaxaca la muestra Homenaje a Tamayo.

Se trata de una serie de intervenciones artísticas hechas por 30 artistas sobre una pieza de fibra de vidrio con la figura de una rodaja de sandía, una de las figuras icónicas en la obra de Tamayo.

El artista las pintó a lo largo de su carrera. De hecho, Sandías (1980) es uno de los últimos cuadros frutales del artista y es considerado el más famoso y admirado de la serie de sandías. Fue vendido por 4.9 millones de dólares en Nueva York en mayo de 2019. 

La exposición-homenaje al oaxaqueño fallecido en 1991 a la edad de 91 años se ubica en la Plaza de la Danza y  fue creada especialmente para exhibirse al aire libre debido a la pandemia por Covid-19 y además porque los museos de la ciudad aún se encuentran cerrados, a pesar de que el semáforo epidemiológico indica baja posibilidad de contagio.

“No queremos que pase desapercibido este aniversario de su muerte por eso decidimos hacer un homenaje. Rufino Tamayo fue una persona genuinamente generosa que ahora que lo pienso me sorprende que no hayamos estado conscientes de ello de manera colectiva, pues no tenemos aquí hoy ni monumentos, ni plazas públicas que reconozcan ese mayúsculo hecho”

Nancy Mayagoitia

La promotora de arte considera que, para alcanzar a ver esa generosidad de Tamayo en su contexto histórico, hay que ir tiempo atrás, fuera de esta época de redes sociales o fortunas inmedibles; quizá así se puedan observar el valor en sus aportaciones.

«Tamayo fue un hombre universal, un hombre generoso»

Tamayo siempre estaba pensando en los demás, dice Nacy Mayagoitia, recuerda su labor por construir y donar una casa hogar para la población adulta mayor  en Cuernavaca, similar a la que luego fue construida en la ciudad de Oaxaca. 

Desde luego menciona entre los proyectos relacionados con el arte, la colección de piezas prehispánicas de gran valor cultural, simbólico y no menos estético que construyó durante 20 años y  que luego donó en 1974 a su pueblo, Oaxaca. El acervo conforma hoy el conjunto de piezas del Museo de Arte Prehispánico de México Rufino Tamayo, ubicado a sólo tres cuadras de esta Plaza en la que ahora se le ofrece el homenaje.

Sin faltar el Taller de Artes Plásticas Rufino Tamayo de Oaxaca el cual fundó en 1974. “Este taller ha cambiado la vida de muchas personas, y de tantas maneras, a veces, incluso, sin darnos cuenta, todo ello debido a su visión de maestro generoso. La forma en que Tamayo nos ha tocado con su generosidad es incalculable”, destacó la promotora cultural, en coincidencia con las palabras de la periodista Ingrid Suckaer.

Suckaer considera que actualizar el legado de Tamayo sería fundamental en estos tiempos, no solo por haber sido un gran artista oaxaqueño, también fue un hombre ejemplar en muchos sentidos, por el solo hecho de haber sido un artista que provenía de orígenes muy humildes y que siempre fue capaz de sobreponerse a cualquier  contratiempo.

“Siempre tuvo una enorme capacidad de resiliencia y una enorme  capacidad de percatarse de quién era él y verse en un contexto internacional.  Creo que nos serviría para que tratáramos de emularlo en el sentido de auto observarnos, de luchar por nuestros ideales, y creo que sin duda Tamayo sería un enorme ejemplo para las nuevas generaciones”, dijo en una entrevista especial.

Las sandías intervenidas miden 2 metros de ancho por 1.10 de alto y se exhiben en la Plaza de la Danza hasta el mes de diciembre.

Los artistas participantes son: Shinzaburo Takeda, Raúl Herrera, Arthur Miller, Raúl Soruco, Gerardo de la Barrera, Cecilio Sánchez, Felipe Morales, Román Llaguno, Samuel Rojas, Emiliano López, Adán Paredes, Miriam Ladrón de Guevara, María Rosa Astorga, Enrique Flores, Eddie Martínez, Virgilio Santaella, Josefa García, Hugo Vélez, Abraham Torres, Saúl Castro, Guillermo Olguín, Rolando Rojas, Ivonne Kennedy, Ixrael Montes, Fernando Andriacci, Rosendo Pinacho, Ana Santos, Alberto Aragón Reyes, Guillermo Pons y Jarol Moreno.