Fotogalería: Edith Morales
Una marcha-calenda recorrió algunas de las principales calles de Oaxaca este viernes. En tiempos de Guelaguetza esto parecería normal, pero a diferencia de las calendas que se organizan para promover la fiesta oficial de la Guelaguetza, ésta se organizó por la defensa de los bienes comunes de la entidad.
La marcha partió de la fuente de las Ocho Regiones, participaron niñas, niños, jóvenes y personas adultas de la capital del estado e integrantes de colectivos, así como campesinos de distintas comunidades de Valles Centrales, las cuales han denunciado la invasión de la industria minera en sus territorios a lo largo de una década.
La música de banda acompañó la marcha-calenda en la que figuraron enormes marmotas con leyendas como “ Aquí decimos sí a la vida, no a a la minería”, acompañadas de un empequeñecido “tiliche”, el personaje oficial de la Guelaguetza, que versiones populares refieren que representan a los espíritus malignos.
Con grandes y pequeñas pancartas, habitantes de Monte del Toro, Santa Catarina Minas, San Dionisio ocotepec y El Vergel, entre otras comunidades, reiteraron su posición de defensa de sus tierras frente a la industria minera.
“No permitiremos que se genere contaminación y se ponga en peligro nuestro pueblo”, “ no necesitamos arriesgar el futuro de nuestras tierras y nuevas generaciones” , se leía en las pancartas.
También participaron integrantes del colectivo Espacio Estatal en Defensa del Maíz Nativo, quienes en días pasados organizaron el programa “Guelaguetza en la vida cotidiana” para reivindicar la guelaguetza como espacio de intercambio entre los pueblos, donde el maíz representa la semilla de resistencia.
Además, evidenciaron lo que llaman el despojo de los bienes naturales y culturales.
“En tiempos de gentrificación y Guelaguetza, la ciudad es de unos cuantos y se prepara para que todo se vea bonito. Los que antes vivíamos en las vecindades del centro de la Ciudad, hemos sido empujados a las colonias de las orillas, donde no hay agua”, dijeron.
El espectáculo de la Guelaguetza es una fiesta impuesta, está hecha para acumular dinero, explicaron, es contrario a la esencia de esta práctica de los pueblos de Oaxaca que se hace sin dinero y que va contra las ideas del capitalismo. Mientras, en las comunidades se imponen megaproyectos que pretenden saquear la riqueza de la tierra y convertirla en dinero, aunque eso signifique la destrucción de la naturaleza, explicaron en su pronunciamiento.
Con esa misma postura, este viernes participaron en la marcha-calenda por las calles de Oaxaca, junto a las organizaciones convocantes como el Frente No a la Minería, por un futuro para todos, Asamblea de Oaxaqueños en Defensa de la Tierra y el Territorio, Servicios para una Educación Alternativa Educa, entre otras, las cuales reivindican el 22 de julio como el Día de Rebeldía contra la minería.
La marcha-calenda culminó en la Alameda de León con un programa cultural, musical y político con el que refrendan la defensa de los bienes comunes de todas las personas que integran los pueblos de Oaxaca.
Foto de portada: Cortesía de Educa