Por Rocío Flores /Red de Mujeres Periodistas de Oaxaca.
Este 3 de febrero el Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca (TSJO) resolverá la situación jurídica de Juan Vera Carrizal –presunto agresor del ataque con ácido contra la oaxaqueña María Elena Ríos–, quien en audiencias pasadas pidió la reclasificación del delito de tentativa de feminicidio a lesiones.
El argumento de la defensa de Juan Vera Carrizal para pedir la reclasificación del delito es que la víctima sobrevivió y que no se trata de un delito grave.
En entrevista para la Red de Mujeres Periodistas de Oaxaca, María Elena manifestó su temor ante esta resolución. Primero, porque el responsable de llevar esa audiencia es el juez Víctor Jorge Luis Velasco Castellanos, quien liberó a los detenidos por la desaparición de otra joven de la misma región, Zayra Leticia Morales Loyola, quien hasta la fecha sigue desaparecida y el delito impune.
Además, por el antecedente de la audiencia más reciente, la cual inició el 16 de enero y concluyó el 21 del mismo mes, en la que el juez Teódulo Pacheco Pacheco resolvió a favor de su agresor, otorgándole prisión domiciliaria, justificando que el acusado presenta problemas de salud como parkinson y que la víctima sigue viva y tiene medidas cautelares.
“En la audiencia dijo que si da lugar a la prisión domiciliaria porque no se trata de un feminicidio (aunque el delito es feminicidio en grado de tentativa). Tú estás viva”, me dijo.
La joven saxofonista dijo que aunque las leyes son interpretativas, la postura del juez excede la arbitrariedad y la violencia.
Explica que lo mismo ocurre con el juez del Décimo Distrito Ponciano Velasco Velasco, quien atiende otro amparo de Vera Carrizal para que se revierta el embargo que se le impuso como medida para garantizar la reparación del daño a la víctima, tal como dicta el Código Penal para cualquier etapa del procedimiento legal.
En el caso de María Elena Ríos hay al menos 11 amparos con los que se busca liberar de responsabilidad a su presunto agresor.
La joven mixteca considera que es una estrategia clara de la defensa del empresario y político priista que busca desgastarla a ella y a su equipo jurídico.
Lo más lamentable, dice, es la postura del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca Eduardo Pinocho Sánchez, quien muestra un total ausencia e indiferencia en el caso a pesar de que es un tema a nivel nacional.
“Eso es muy grave y yo he manifestado en cada oportunidad, que debe renunciar porque no soy la primera, ni la única mujer a la que se le violentan los derechos humanos”.
La audiencia para que el TSJO decida la situación se realizará este viernes a las 12:00 horas
Si se reclasifica su pena podría ser mucho menor, ya que por el delito de feminicidio la sanción es 40 a 60 años de prisión y por el de lesiones se impone de dos a cinco años de prisión y multa de doscientos a dos mil pesos, o hasta nueve años si se considera una lesión mayor, de acuerdo con el Artículo 273 del Código Penal de Oaxaca.
María Elena refleja su temor. “Él este tiene poder político y económico, en la última audiencia burlándose dijo “cuando salga voy a limpiar mi nombre y no me voy a asociar las manos». Dijo que iba a salir porque tiene Parkinson, pero él está sano a pesar de sus 59 años. Está perfectamente bien de salud», reprocha la joven de 29 años de edad, quien lleva más de tres luchando para que el ataque cometido en su contra en septiembre de 2019, no quede en la impunidad.
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