*A 50 años del golpe militar en Chile, la pregunta sigue siendo, ¿Dónde están?

Por Paola Flores

Entre 1973 y 1990 los militares chilenos persiguieron, torturaron, desaparecieron y mataron a quienes se oponían al régimen encabezado por Augusto Pinochet. Actualmente hay aún cerca de mil 500 personas desaparecidas, cuyos familiares los siguen buscado.

El fotógrafo Mauricio Toro-Goya cultivó los últimos 25 años una amistad con estos buscadores y buscadoras de justicia y han contribuido juntos como co-autores para la creación de Procesión, un cortometraje que a través de símbolos cuidadosamente escogidos representa este anhelo por un reencuentro con sus hermanos, hermanas, hijos, padres y madres.

A 50 años del golpe militar, conmemorado el pasado 11 de septiembre, el Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo se ha sumado a museos de Japón, España, Alemania, Francia, Brasil, Argentina, Perú, Bolivia y Uruguay para exponer esta obra audiovisual.

Durante un recorrido por la sala que resguarda este guión ficcional, así como un retrato de gran formato y una imagen que reproduce el Palacio de La Moneda, Toro-Goya explicó el proceso de producción de esta pieza.

Dijo que todo proceso creativo cuando aborda cuestiones tan fuertes como la desaparición forzada, siempre genera conflictos y en este caso, ocurrió una gran catarsis: “Tanto el equipo que filmaba, como los familiares que participaban contactaron con esa realidad guardada, sobre todo con esto que es una memoria tan traumática.”

El fotógrafo considera que (simbólicamente) esa memoria traumática, esta detenida en el tiempo, siempre es 1973 para las personas que tienen ese trauma.

“El espacio escénico es referencial, pero también representa el lugar negado: el sitio donde se encuentran los desaparecidos. Aquí se hace presente la comunidad que ha vivido el trauma y el horror para desde el performance situar el anhelo del encuentro.”

Toro-Goya propone imaginar cuerpos en el presente que se forman desde el retrato, con rostros del pasado, pero que permanecen intactos en la memoria de quienes los buscan, porque estos y otros objetos contienen la sustancia que transfiere la potencia a quienes siguen buscando.

Procesión estará en las salas del Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo hasta el 10 de noviembre de este año.