Oaxaca se  ha convertido en una de las entidades con las cifras más altas en feminicidios en el país. Hasta este mes 102 mujeres han sido asesinadas y 379 mujeres han sido víctimas de desaparición en lo que va del sexenio del gobernador Salomón Jara, de acuerdo con los datos de la organización Consorcio Oaxaca.

Aunque  la violencia feminicida vulnera a toda la sociedad, según explican organizaciones nacionales e internacionales, en el caso de los feminicidios son las madres quienes salen a las calles a recordar que la impunidad impera en los crímenes de sus hijas.

“En especial cuando se trata de las hijas o los hijos nos duelen a las mujeres porque pasaron por  nuestro cuerpo y son sangre de nuestra sangre”, dice Soledad Jarquín, una de las madres que este 25 de noviembre, en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujeres se reunieron para marchar por la impunidad que impera en los casos de feminicidios de sus hijas.

En el caso de Maria del Sol, su hija, dice “no ha pasado absolutamente nada, su caso fue sobreseído de manera parcial en el año 2022”, es decir el juez resolvió suspender el proceso penal argumentando errores en la investigación (de parte de la Fiscalía), entre ellos la implantación la pericial de balística de otro crimen y la fabricación de testigos por parte del Ministerio Público.

Solo han hecho responsable a una persona por  robo del equipo de su hija, que hasta hoy no ha pisado la cárcel.

«Todas estamos sujetas de violencia machista. En todos estos años hemos sido víctimas de esa violencia, pero hoy la responsabilidad está en manos del gobernador Salomón Jara Cruz», dice la periodista.

A casi doce meses de su mandato, el gobernador no ha emprendido acciones para detener los feminicidios, coinciden las madres víctimas de la violencia. Indican que cada sexenio lo que permanece es la omisión, la corrupción, el tráfico de influencias, la indiferencia social y la justificación cultural.

También reclaman al Poder Legislativo que la elección de perfiles no idóneos como titulares de la Fiscalía General de Oaxaca.

Natalia Martínez es otra de las madres que el sábado salió a denunciar la impunidad en el caso de su hija Deysi a quien asesinaron en 2011.

Ya son 12 años. No hay sentencia porque no hay peritos, cuenta Natalia. También observa que los presuntos responsables del delito de su hija así como muchos otros victimarios se amparan en el protocolo de Estambul, una valoración para determinar si las personas que lo solicitan han sido torturadas.

«Quieren que los vengan a examinar peritos de la PGR. El Estado solo tiene un perito médico, un perito psicólogo. Y cada vez que se acuerda un amparo para que se lleve a cabo el protocolo el médico está enfermo. Llevo siete años con ese tema.

Todos los días es algo difícil, solo Dios sabe cómo nos mantenemos de pie, son desgaste emocional y económicos. Pero somos mamás». 

Su hija Alma Deysi Martínez Martínez estaba a punto de cumplir 15 años cuando la asesinaron. Estaba en su último año de secundaria, era de la escolta, recuerda la madre. El feminicidio de Deysi ocurrió el 8 de mayo de 2011. 

“La encontramos el 10 de mayo entre unos carrizales. Ya se imaginarán mi Día de las Madres. Mi hija fue violada y estrangulada por tres hombres, están en la cárcel, pero en estos 12 años no ha habido sentencia”.

También en esos 12 años han ocurrido 1, 200 asesinatos de mujeres; 102 de ellos durante esta administración.