Más del 40% de jóvenes en Oaxaca laboran en empleos informales, según el Inegi, lo que las priva de derechos fundamentales como la seguridad social, salarios dignos y condiciones laborales seguras.
Esta precariedad laboral no solo vulnera sus derechos, sino que perpetúa la desigualdad y limita sus oportunidades de desarrollo integral.
En ese contexto, la organización Consorcio Oaxaca hizo un llamado urgente a todas las autoridades estatales, a las instituciones responsables, así como a los empleadores para que se comprometan con la creación de empleos dignos.
De acuerdo con la ONG de defensa de los derechos humanos, deben ser trabajos que no solo satisfagan las necesidades económicas, sino que también garanticen seguridad social y prestaciones como seguro médico, salarios y horarios justos, condiciones laborales seguras, libres de violencia, sin acoso ni hostigamiento sexual.
“La situación actual está lejos de cumplir con esas condiciones. La creación de empleos con prestaciones laborales no es solo necesario, es urgente. La falta de estas condiciones tiene consecuencias a largo plazo, afectan a su salud, seguridad económica y capacidad de sostener sus vidas de manera digna”, apunta.
Además exige al gobierno de Oaxaca implementar políticas públicas integrales que no se limiten a ofrecer apoyos asistencialistas o becas, sino tener acceso a empleos dignos y oportunidades reales de desarrollo integral.
En ese mismo sentido, manifiestan que al ser Oaxaca un estado multicultural, las políticas laborales deben reconocer e incluir la diversidad de trayectorias y contextos.
Además considerar los trabajos en comunidades rurales, en el ámbito artesanal, y en otros sectores que también contribuyen al desarrollo del estado, y a quienes les corresponden pagos justos, para que no solo se creen empleos en oficina destinados a una población con título universitario, que viven en ciudades y que hablan español.