Saraí Fernández/Rocío Flores
Margo Glantz es una escritora joven de edad infinita, así se definió en una charla previo a un homenaje que la Feria Internacional del Libro le preparó en Oaxaca.La maestra en letras inglesas charló ayer sábado con reporteras y reporteros sentada en un amplio espacio del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca (MACO), donde recuperó el tema central de la FILO, la memoria.
“No hay rango de la escritura donde la memoria no tenga importancia, políticamente si uno no usa la memoria a su favor, jamás entenderá nada de lo que está pasando” dijo la escritora, Doctora en letras hispánicas por La Sorbonne en París.
Margo Glantz se convirtió en 2015 en la primera escritora mexicana en ganar el Premio Iberoamericano en Narrativa «Manuel Rojas» por decisión unánime del jurado y dedicó su premio a las escritoras latinoamericanas.
“ Me extraña que no hay premio a otras mujeres “ dijo en ese contexto la escritora y crítica literaria que este sábado se declara también feminista no militante y cuyas obras reflejan su compromiso con temas relacionados con las mujeres como erotismo, sexualidad y cuerpo además de migración y memoria,
“Me considero feminista no militante, no soy fanática pero soy completamente feminista» comentó en la charla con representantes de los medios de comunicación, ante los cuales recordó el Colegio Nacional observó una discriminación muy violenta, “creo que todas y todos tenemos el derecho a entrar… nos ven (a las mujeres) como una raza aparte, a los hombres en cambio, les dan más derechos”, dijo la escritora y crítica literaria, quien más tarde en su homenaje hablaría de sus recuerdos y obsesiones también plasmados en su literatura autobiográfica, o “autorreferenciales”, literatura que – confiesa- a sus 86 años como desde muy joven, era y sigue siendo su conexión con el mundo.