Vladimir Méndez/
Mientras haya un abismo entre la sociedad y el Estado, situación fomentada por la oligarquía, la juventud mexicana tendrá que buscar mecanismos para expresar su descontento y conseguir reformas, opinó Saúl Hernández durante la conferencia previa al concierto que ofreció Caifanes ante miles de personas durante el Corona Music Fest 2013 en la ciudad de Oaxaca el sábado pasado.
Aunque reprobó las manifestaciones violentas tanto de estudiantes como del magisterio, reconoció que la sociedad mexicana no cuenta con las estructuras para encauzar “las inquietudes de la juventud y de todos nosotros”. Acusó que “somos una sociedad sectarista, separatista”; “no veo principios ni solidaridad, no hay respeto ni una clara idea democrática”, producto de la división de clases, sentenció. Sin embargo, afirmó el líder de Caifanes, “no será con vandalismo sino con base en la razón” como se conseguirá una estructura más clara.
Estar en Oaxaca representa para Caifanes, dijo, regresar a un estado poderoso, que se caracteriza por su fuerte defensa étnica, que “siempre ha sido confrontativo” y muy cultural; “es un estado muy poderoso”, “mágico”, concedió el cantante y guitarrista de la agrupación.