Rocío Flores
OAXACA, Oax. En medio de la Alameda de León, escenario central de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO), un stand de la Cámara de Diputados parece emular el desinterés de esta institución por las políticas culturales o la Cultura.
El stand vacío se ubica justo enfrente del foro FILO, en el que los organizadores realizan algunas de las principales actividades para promocionar sus novedades editoriales y donde el público puede escuchar o dialogar con algunos escritores.
De acuerdo con el gerente comercial de la Librería Proveedora Escolar, Jesús Julián, el stand fue colocado para que las instituciones patrocinadoras pudieran exhibir sus publicaciones o novedades editoriales, sin embargo, hasta este día, el cuarto de la edición 37 de FILO, no ha habido ninguna noticia de quienes representan a esta institución.
El área de Prensa por su parte informó que en esta edición, no cuenta con aportación de la Cámara de Diputados federal ni local y desconoce el motivo de la colocación de este espacio.
Ayer, en el stand se podían observar anaqueles sin libros, pero este miércoles luce completamente vacío.
El stand no tiene información por ningún lado, más que el nombre de la institución legislativa en la parte superior, y está colocado en el pasillo asignado para las 55 empresas libreras participantes, seis instituciones, 12 espacios para juegos didácticos y cuatro stands de comidas.
Cabe señalar que la Cámara Baja redujo el presupuesto al sector cultural, en comparación con el que se venía aprobando por lo menos en los últimos seis años. En 2017 se redujo un 20 por ciento comparado con el de 2016. De 15 mil 255 millones de pesos en 2016 pasó a 12 mil 428 millones de pesos en 2017.
Apenas ayer la Cámara de Diputados federal determinó que no emitirá la convocatoria pública para asignar recursos a proyectos culturales privados y estatales para 2018.