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Por La Tehuanita
El gobernador Salomón Jara Cruz anunció este lunes la creación de la Ciudad del Deporte en la capital oaxaqueña, un proyecto que prevé la integración de la cancha de futbol «Manuel Cabrera Carrasquedo», el Polideportivo «Venustiano Carranza» y el estadio de beisbol «Eduardo Vasconcelos» mediante una intervención urbana. Con la peculiaridad de que este último espacio deportivo, propiedad de la Universidad Autónoma «Benito Juárez» de Oaxaca (UABJO), ha sido dado en comodato por 50 años a la Fundación Alfredo Harp Helú para convertirlo en la casa de los Guerreros de Oaxaca, equipo del ex banquero y magnate beisbolero. El rector de la UABJO Cristian Eder Carreño López resaltó que para la cesión del estadio, contó con el aval del Consejo Universitario, integrado por alrededor de 115 representantes de las escuelas, facultades e institutos de la Universidad. 115 personas decidieron por toda una comunidad universitaria. Este hecho hace recordar a ciertos representantes populares que andan cambiando la Constitución amparados en su ilustre cargo. Pero nos estamos desviando del tema. El caso es que el Rector dejó claro que «por ninguna circunstancia se pierde la propiedad de la Universidad, sencillamente lo que hacemos es un préstamo a 50 años» dijo; es decir, una vida. Y aunque su argumento sea de risa y ya quisiera cualquier mortal un préstamo ‘sencillo’ como ese, algo pesará en su conciencia que los nervios lo traicionaron al indicar cual patriota que «la Historia nos juzga, y hoy lo que estamos haciendo es darle a Oaxaca un espacio para el deporte». Total, para el vencimiento del plazo tal vez ni Harp ni usted ni yo estaremos vivos, querido lector. Aunque claro, si Dios quiere, para ese entonces Carreño López y su bola de consejeros universitarios estarán gozando de las mieles de su jubilación, con la conciencia tranquila de haber heredado a Oaxaca un estadio de primer nivel y siendo vanagloriados como próceres de la patria. O al menos este parece ser su sueño. En tanto el sabio Rector informó que va a rehabilitar las canchas ubicadas frente a Ciudad Universitaria para que allá se vayan a jugar los jóvenes que ya no podrán ocupar el espacio cedido a Harp Helú, el cual hará ‘un donativo’ para poner luminarias en aquella zona y que los muchachos no jueguen a oscuras. Sobre el estadio, el ex banquero expuso que el proyecto ejecutivo de toda la obra estaría listo en enero; «fiscalmente no puedo utilizar dinero de mis fundaciones para hacer el estadio de beisbol, porque no es deducible», explicó; por tanto, precisó, el financiamiento sería entonces para la operación del Museo de la Fama y un planetario que serán instalados en el inmueble. Aquí en Tehuantepec, su Fundación también intervino y convirtió un Centro de Desarrollo Infantil derruido por un temblor, en una extensión de La Salle, digo, en una ‘Escuela de Artes y Oficios’ denominada Casa Guietiqui. ¡Ay nanna!