Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

36 razas de maíz oaxaqueño, bajo amenaza

Hablar del maíz, decir que somos gente de maíz no es solo una linda metáfora. El intelectual y activista Gustavo Esteva lo define como un estado de las cosas.

El fundador de la Universidad de la Tierra en Oaxaca no da lugar a la duda. Plantea que nuestra vida está asociada con el maíz y no solo con la cuestión alimentaria, sino que define un modo de vivir y una afirmación de nuestra relación con la tierra. Por eso, junto con productores, sostiene que la defensa de la semilla es necesaria y urgente, que es «un asunto de vida o muerte».

Después del frijol y el arroz, el maíz ocupa el tercer  lugar de consumo en el mundo. Es el cultivo más representativo del país, de acuerdo con productores y promotores ambientales participantes en la jornada denominada Maíz en México: tradición, ciencia  ¿y futuro?, que inició ayer en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca.

A diferencia de los primeros granos, el maíz destaca por su capacidad para adaptarse a todo tipo de suelos, alturas sobre el nivel del mar, climas y precipitaciones pluviales, destacan algunos de los ponentes, entre ellos Miguel Chávez Santiago y Alejandro Cruz López,  Arturo Guerrero, José Luis Bustamante y Arturo Cuevas Cabrera, quienes compartieron también su postura ante la situación y desafíos que enfrenta la producción de los maíces ancestrales en Oaxaca, donde se les valora no solo como un alimento sino como un eje fundamental en la cosmovisión de los pueblos, pues es un vínculo entre el ser humano y la naturaleza.

“Acá comemos tortillas, totopos, tlayudas, tostadas , las tetelas, tamales. La base fundamental de la alimentación de las oaxaqueñas, oaxaqueños y de toda la población mexicana es el maíz. Nos da  identidad. Somos hijos del maíz”

Gustavo Esteva

Esas semillas, de las cuales existen 64 razas registradas, 36 solo en Oaxaca, están bajo amenaza de ser sustituidas por otras que tienen  una capacidad efímera, sentencia Esteva.

El intelectual comparte su preocupación  por lo que llama una “una ola suicida de despojo con un impulso patriarcal, capitalista y colonial» que está acabando con todo a su paso.

Explica que una parte central de ese impulso destructivo, es el supuesto de que lo que hacen los humanos es siempre mejor que lo que produce la tierra, que da la vida. Y como ejemplo para explicarlo retoma el caso del maíz.

“Se plantea que se vale destruir lo vivo y lo que ha nacido de la madre tierra porque van a poner en su lugar algo mejor, semillas producidas en un laboratorio por las corporaciones”.

Considera que como sociedad no podemos esperar que los gobiernos modifiquen las políticas que han impuesto por décadas  y que resultaron erróneas,  sino que se tiene que tomar el asunto en nuestras manos, tal como lo hace la organización  internacional Vía Campesina, la cual agrupa a organizaciones de campesinos, pequeños y medianos productores, mujeres rurales, comunidades indígenas, trabajadores agrícolas emigrantes, jóvenes y personas adultas de 120 países del mundo.

Esteva destaca que en las semillas nativas que se siguen protegiendo con la sabiduría histórica de los pueblos, hay códigos genéticos que tienen la memoria de millones de años de experiencia, de cambios climáticos.  “Son nuestra principal  esperanza ante las condiciones de colapso económico que se vive en el mundo”, resuelve.

La conferencia inaugural Maíz en México: tradición, ciencia ¿y futuro? se realizó este jueves en el IAGO, institución emblema del recién fallecido pintor y también activista Francisco Toledo, uno de los más férreos defensores del maíz nativo en Oaxaca.

Este sábado como parte de la jornada se realizará el coloquio Maíces Nativos ante los Transgénicos, en el Centro Cultural San Pablo, de 10 am a 4:30pm, donde se expondrán agro ecosistemas de milpas y los riesgos de las nuevas técnicas de modificación genética.

Milpa y Acción por el Clima, una calenda tradicional desde el Hotel Posada del Marqués -en la calle 20 de noviembre 906- que empezará a las 6 pm – pasando por el Zócalo y hasta la Plaza de Danza.

Más tarde se podrá degustar de una comida ancestral que incluye elotes, esquites y tlayudas de maíces nativos de colores. A las 7 pm en la Plaza de Danza el Circo~BioLoco, un gran espectáculo visual que expone los peligros de la agricultura industria, y a la par celebra la conexión con la naturaleza.

Los eventos serán el sábado 15 de febrero de 10 am – 8:30 pm en el Centro Histórico de Oaxaca para todo el público y son de gratuitos.

2 Comentario

  • José antonio gracia medrano alonso
    Posted 18 de febrero de 2020 at 12:45

    La lucha por el maíz, por el país y por el planeta es la misma, sin tregua hasta la victoria

    • Ana Ruiz Díaz
      Posted 18 de febrero de 2020 at 21:39

      Así es Toño. Libre comercio es uniformidad y milpas son diversidad…los tratados Tmec y transpacífico traen el caballo de Troya de la privatización de semillas que convierte en delito la práctica de guardar semillas

No se permiten comentarios