Efervescencia social, un error de la Fiscalía: especialistas
Rocío Flores/Foto: JLP
OAXACA, Oax. La protesta de médicos y la efervescencia social que se ha desatado por el caso de Edward en la ciudad capital, son una prueba de que la Fiscalía incurrió en errores, coinciden especialistas.
Para sociólogo e investigador del Instituto de Investigaciones en Humanidades de la UABJO, Porfirio Santibáñez Orozco, estos hechos, derivados de la detención del médico Luis Alberto P.M. presunto responsable de la muerte de Edward Luna Trujillo son una prueba irrefutable de que la Fiscalía incurrió en errores de apreciación.
El académico opina que la muerte de un pequeño de tres años, por una presunta negligencia es un tema sensible, sin embargo señala, la plaza pública no es el lugar donde se dirima el asunto hasta llegar a un veredicto.
Por su parte el abogado Jesús Matías Hernández, integrante del Colegio de Amparo «Ignacio Burgoa Orihuela, opina que el problema no es que se haya judicializado el asunto, es decir, que se haya detenido al médico, cómo presunto responsable, sino lo grave fue acusarlo de homicidio doloso y no culposo. Explica que este hecho es que mantiene al médico traumatólogo en prisión preventiva mientras se investiga si es culpable o no.
Matías Hernández señala que el fiscal general del estado, Rubén Vasconcelos Méndez incurrió un error, ya que más allá de la responsabilidad del médico, él representa a una autoridad y no puede estar dando explicaciones, “no puede litigar frente a los medios o las redes sociales, tampoco puede dar informes del proceso porque puede afectar a una de las partes”, abunda.
[quote]“El fiscal se está equivocando, demuestra inmadurez e inexperiencia”.[/quote]
Lamentablemente señala Matías Hernández, hay mucha negligencia médica. “Es es triste decirlo, pero es cierto”. No obstante, precisa, los médicos se pueden equivocar, los abogados, los fiscales, pero para eso existe el juicio y es el recurso para aplicar la Justicia.
Desmantelamiento en Salud
Después de la marcha que galenos del país, realizaron el domingo pasado en la capital del estado en apoyo a su homologo detenido, la médico pediatra Lorena Mendoza señaló uno de los graves problemas que la sociedad y las autoridades no quieren observar o reconocer es que “el sistema de salud está rebasado, corrompido, saqueado y abandonado”.
La especialista comenta que en lo que se refiere al asunto jurídico, son los peritos médicos quienes deben resolver, sin embargo precisa, si fuera como lo manifestaron al principio, que murió por el efecto adverso o la concentración de la lidocaína, es necesario que se informe que ese anestésico es el único que se tiene en primer nivel en el estado.
En el caso de la salud Pública, apunta, “la cosa está tan jodida que no nos daban nada para contrarrestar alguna reacción a ese anestésico, aunque esté en el cuadro básico. No había hasta hace unos meses”, declara.
Por otro lado reprueba el desconocimiento de las autoridades al frente de la administración, quienes se atreven a declarar sin conocimiento de causa, en este caso dice, el doctor no es responsable de aplicar la medicación, él opera, sólo eso.
[quote]“Hay muchas cosas que investigar ahí. Sin embargo lo que me sigue preocupando es que salen a declarar sin conocer estos temas”.[/quote]
Preocupa el nivel de las personas que ocupan puestos claves en el gobierno, añade.
Porfirio Santibáñez Orozco coincide que este lamentable deceso es, en parte, resultado de un desmantelamiento del sistema estatal de Salud en el que deberían salir juzgados todos aquellos que han ido convirtiendo a este sector en una mercancía y no la quieren reconocer ni defender como un derecho.
Además, dice, en hechos como éste a todos nos corresponde una parte de la responsabilidad. Está documentado que los padres de Edward acudieron al hospital civil donde no pudieron ser atendidos por la situación de conflicto que todos conocemos que se vive allí y tuvieron que ir a una clínica particular donde sucedieron los hechos.
[quote]“Es un asunto complejo, con abundantes matices y de difícil resolución porque no hay uno que tenga toda la razón y su análisis detallado puede dar lugar a muchas reflexiones, si la sociedad se lo propone”.[/quote]
Porfirio Santibáñez añade que este hecho está causando revuelo porque los diferentes sectores de la sociedad que se están movilizando tienen la oportunidad de reclamar sobre una serie de derechos latentes que la autoridad debe atender, utilizando las mejores normas que ya existan o creando nuevas si fuese necesario.
«La familia y quienes se solidarizan con ella tienen sus razones, pero también las tienen los médicos de una buena parte del país y hasta los funcionarios y políticos profesionales que van a querer intervenir para ver qué beneficio sacan. Todos, menos los que quieran lucrar con este asunto, tienen una parte de la razón y deben ser atendidos con justicia por la autoridad».
Por su parte, el abogado señala que además de la defensa de su colega, en el fondo, lo que la comunidad médica está reclamando es que la mala praxis no sea un delito doloso, sino culposo, y con ello atender el proceso en libertad.
La muerte en lo público
Los especialistas en distintos campos destacan que esta es una lamentable experiencia de la que toda la sociedad debe aprender.
Como observador de la vida pública, refiere Santibañez, este caso ha llamado la atención de muchos porque nuestra sociedad se está transformando y hoy vivimos una extraña paradoja: la mayoría de los ciudadanos nos hemos vuelto más sensibles al dolor y al sufrimiento y quisiéramos evitarlos pero, al mismo tiempo, los que tienen poder para hacerlo nos están llevando a vivir tiempos en los que las leyes del mercado deciden sobre nuestra vida y nuestra muerte.
“Ojalá que éste caso no sirva solamente para recordarnos lo hueco de varias de nuestras instituciones y lo falso de una buena parte de las verdades oficiales y de las mentiras que a veces la propia sociedad se fabrica”, apunta el investigador social.
El papel de los medios
Más allá del rumbo que tomará este asunto en un ambiente tan sensible, con una aparente polarización que se manifiesta en la prensa, el sociólogo comenta que lo deseable es que los periodistas aborden el asunto con profesionalismo, le den voz a todos los que tengan algo importante que decir, escuchen las razones y argumentos de todos, pero sobre todo, destaca, que la autoridad a la que corresponde tomar la decisión final lo haga con los mejores elementos de juicio.
Por lo pronto, Julio Bueno, secretario general del Movimiento Nacional YoSoyMédico#17, que surgió en el 2014 a raíz de un proceso penal sobre 16 médicos de Jalisco, ha convocado a un paro nacional de médicos, si no se libera al doctor acusado de homicidio doloso antes del viernes 13 de este mes, para que pueda llevar su proceso en libertad.
“Si no liberan a Luis antes del 13, convocamos a paro de labores en todas las instituciones llámese privados u hospitales públicos, que el día 13 no se presenten a trabajar, ningún médico, que se trabajen los puros servicios de urgencias”, declaro a la prensa nacional.
El personal médico que marchó en 76 ciudades del país demanda la intervención directa del presidente Enrique Peña Nieto y advirtió que se está generando una «olla de presión» con el encarcelamiento de médicos que «puede salirse de control».
El caso da para muchos interrogantes más sobre lo que vivimos hoy, en esta sociedad que está reclamando cambios urgentes, concluye el analista social Santibáñez Orozco.