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La expulsión del reino

En 1992, un grupo de artistas colaboró con el gobierno del estado para fundar el Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca. Entre los artistas que contribuyeron estaban Rodolfo Morales y Francisco Toledo, además de varios otros. La mayoría quedaron integrados al patronato Asociación de Amigos del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca A. C., que se hizo cargo del mantenimiento y la administración de la institución con el apoyo de fondos estatales y federales.

Rubén Leyva, pintor oaxaqueño, apoyó al rescate del MACO cuando el 30 de septiembre de 1999 su edificio sede fue severamente dañado por un sismo. Con un donativo de obras suyo y del pintor Sergio Hernández, se logró colectar los más cien mil pesos que costó la reparación. Posteriormente, el artista donó al museo una camioneta para transportar obra, con la cual se sustituyó el viejo vehículo que utilizaba la institución.

En 2008, Rubén Leyva convocó a fotógrafos y escritores de Oaxaca a colaborar en la elaboración del gran libro testimonial colectivo Memorial de agravios. Oaxaca, México, 2006. Gracias al impulso del pintor, grabador y escultor, el grupo de autores dio a la luz uno de los más notable volúmenes que examinan el conflicto social de 2006-2007. El libro fue presentado en París, Madrid y La Habana con el patrocinio de Leyva.

En algún momento de 2009, Rubén Leyva y un hijo suyo fueron ferozmente perseguidos por el gobierno de Ulises Ruiz por haber publicado Memorial de agravios. Un valiente médico, contó Rubén Leyva, impidió que los esbirros del ulisismo sacaran a la fuerza al joven Leyva de un hospital donde lo trataban clínicamente.

En 2013, Rubén Leyva, Luis Zárate y José Villalobos se hicieron cargo del patronato Asociación de Amigos del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca A. C. Se distanciaron de Francisco Toledo poco después de asumir el control del museo.

A partir de 2013, Toledo rompió relaciones con los tres pintores que encabezaban la Asociación Amigos del MACO A. C. Exigió auditar al patronato y retirar al triunvirato del museo, pero éstos permanecieron en la institución.

En junio de 2015 Toledo organizó una protesta para oponerse a la construcción de un gigantesco centro de convenciones gubernamental sobre la línea de la Falla de San Andrés, que atraviesa el Cerro del Fortín en la capital de Oaxaca. Agredido por integrantes de un sindicato de transportistas que portaban machetes y otras armas, Toledo fue resguardado por Rubén Leyva antes de que los sicarios lograsen herirlo.

En 2019, el MACO no pudo comprobar ante la Secretaría de las Culturas y Artes del Estado el gasto de alrededor de setecientos mil pesos del presupuesto total de cuatro millones de pesos que le asignó el gobierno estatal. Arrastrando ese adeudo, la institución fue afectada en marzo de 2020 por la pandemia de Covid 19.

A mediados de 2020, sin poder recibir el presupuesto gubernamental de ese año, el MACO comenzó a acumular un adeudo en los sueldos de su personal. En vez de solucionar el problema, la Asociación de Amigos del MACO A. C. comenzó a tener discrepancias internas insolubles, cuando Rubén Leyva, como presidente del patronato, expulsó a Luis Zárate de la Asociación y motivó asimismo la salida de José Villalobos. Con el control total de la institución museística, Leyva se confrontó en 2021 con el personal del museo y al fin hizo expulsar a quienes le reclamaban los sueldos pendientes, incluyendo a la directora del MACO.

De nada sirvió que el artista Alberto Aragón intentase cubrir con un importante donativo los sueldos que hasta entonces se adeudaban. Luis Zárate y José Villalobos también intentaron aportar un apoyo para las trabajadoras y los trabajadores, pero el empecinamiento de Leyva alargó el conflicto laboral e impidió que se cubriera el adeudo que el Museo tenía con el gobierno estatal desde 2019. Pasaron lo años 2022 y 2023 sin que el problema del MACO se resolviera.

El miércoles 28 de junio de 2023, sorpresivamente, el asesor jurídico del gobierno del estado, Geovany Vásquez Sagrero, anunció que la administración estatal “notificó legalmente al representante legal de Amigos del Museo, Rubén Leyva, que a partir de este miércoles queda rescindido el comodato que tenían a su favor en la administración del Museo y por la que tenían en posesión la propiedad y todo lo que conlleva el MACO”. 

Vásquez Sagrero también indico que “de manera inmediata el gobierno del estado toma en posesión las instalaciones del MACO y se inician los trámites administrativos de entrega recepción de todo el patrimonio que alberga el inmueble”.

El Museo queda bajo el resguardo de la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca y se inicia la revisión de todas las obras artísticas del acervo y de las que corresponden al Gobierno del Estado y “a las y los oaxaqueños, porque es un tema de la sociedad oaxaqueña, además de que elementos de la PABIC resguardan el inmueble”.

El representante jurídico gubernamental expuso que “Se tienen informes sobre la aplicación incorrecta de los recursos, tiene demandas laborales y quejas de que el espacio se usaba para fiestas particulares los fines de semana. Tenemos registros de las actas o asambleas de la Asociación Civil en las que desde el 2014 no celebra una sola asamblea, sus estatutos y acta constitutiva dicen otra cosa, parece que se había convertido en un tema unipersonal”. 

Vásquez Sagrero expuso que el gobierno estatal “tomó la determinación de retomar la rectoría del MACO porque el acervo es patrimonio de las y los oaxaqueños; al dar por terminado ese comodato, el Estado recupera el inmueble y será la Secretaría de las Culturas y Artes la que se quede ahora como depositaria y el gobernador definirá la política en este sentido”.

Desde 1992 hasta 2023, durante más de treinta años, el patronato Amigos del MACO A. C. mantuvo el control del Museo. El esquema de autonomía con mezcla de recursos estatales y federales funcionó sin mayores contratiempos hasta 2019. ¿Qué llevó al colapso al modelo de eficiencia administrativa creado por directoras y directores como Sylvia Navarrete, Sonia Carrasco y Fernando Solana Olivares, junto con brillantes colaboradores como Cynthia Martínez y Robert Valerio?

¿Y cómo explicar la transformación del solidario artista Rubén Leyva en un perseguidor y represor de trabajadores del Museo durante uno de los períodos más críticos de la historia de la institución?

El gobierno estatal deberá transparentar lo que es necesario hacer para el rescate y saneamiento del MACO. Ojalá lo consiga el secretario de las Culturas Víctor Vásquez Castillejos. Pero es lamentable que el modelo administrativo de la sociedad civil que tantos buenos resultados dio en el Museo durante casi tres décadas, termine hoy en un colapso, en la expulsión de ese reino del arte de la Asociación Amigos del MACO A. C. y en la turbulencia que envuelve a un artista cuya trayectoria hasta antes de 2019, era muy reconocida. Se cierra una etapa histórica de la cultura en Oaxaca con un tétrico y controvertido desalojo.

1 Comentario

  • charlieasecas
    Posted 1 de julio de 2023 at 10:23

    muchas preguntas, mucha niebla en los actos.

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