De la corresponsalía
Tehuantepec, Oax.- Familiares de cinco de los nueve integrantes de la Resistencia Civil Pacífica del vecino municipio de Santa María Mixtequilla, detenidos la madrugada de este sábado, denunciaron violaciones a sus derechos humanos.
Advirtieron que para este domingo está programada una asamblea de comuneros en el domo de Mixtequilla para tratar el tema del polo de desarrollo del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, y que este podría ser el motivo de la detención de sus familiares, quienes exigen que una parte de los 130 millones de pesos que el Gobierno federal pagó de indemnización a comuneros por 502 hectáreas de tierras, se reparta entre todo el pueblo –pese a que por Ley no les corresponde–.
En una rueda de prensa improvisada bajo los arcos del Palacio Municipal, las denunciantes dijeron desconocer el paradero de sus familiares, y responsabilizaron al presidente municipal de Mixtequilla, Juan Carlos García Salud, y a la síndica, Enith Gutiérrez Jiménez, de su integridad física.
Como informó este medio, la Fiscalía General del Estado difundió en un comunicado que realizó cateos simultáneos en esa población y ejecutó nueve órdenes de aprehensión en contra de Fernando O. S., Adelaido L. G., Alba P. S., Enidia G. V., Albino P. O., Jorge O. Á., Roberto V. O., Gustavo C. J., Armando S. G., Orlando C. G., Ana S. C. y Ricardo V. R.
La dependencia precisó que a los nueve detenidos se les acusa del robo de un vehículo (una patrulla) en perjuicio patrimonial del Ayuntamiento de Mixtequilla –con base en una denuncia presentada por la síndica Gutiérrez Jiménez, según indica un oficio del Juzgado de Control de Santo Domingo Tehuantepec, que autorizó los cateos, por hechos perpetrados el 5 de enero de este año–.
La Fiscalía agregó que “varios” de los detenidos tienen denuncias por delitos del ámbito estatal, como daños por incendio, robo y despojo; y del federal, como obstrucción y daño a las vías de comunicación, cuyas investigaciones están en curso.
Sin embargo, familiares de los detenidos se quejaron del uso excesivo de la fuerza pública por parte de elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), quienes actuaron en coordinación con la Policía estatal, la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), algunos con pasamontañas y sin mostrarles alguna orden judicial; y exigieron información sobre su paradero.
“Entraron con violencia”
Zuleima Palacios Pérez, hija de Albino P. O., de 58 años de edad, declaró que su papá “fue detenido prácticamente como un vil delincuente, en horas de la madrugada… Entraron de manera violenta, entre 4:30 y 4:40 de la mañana… Pregunté por qué, nunca me dieron información…
“De hecho ahorita estamos incomunicados, no hay señal (de internet y teléfono). ¡Qué coincidencia! No tenemos comunicación desde la mañana, para comunicarnos con los familiares detenidos; no sabemos nada de ellos”, expuso.
“Responsabilizo a la síndica municipal de que si algo le llega a pasar a mi papá voy sobre ella. No saben si es una persona diabética, él padece hipertensión. Acuérdate que el poder se acaba. Hoy estás arriba, mañana no sabemos”, advirtió la ciudadana.
“Estoy pidiendo justicia, que me den información de dónde se encuentra él, porque no sé nada”, insistió.
“También hablo por el caso de mi prima (Alba P. S.), que también se la llevaron”, añadió Zuleima.
“Llegaron con agresiones”
La señora Agustina Gutiérrez Chiñas, esposa de Jorge O. Á., denunció que los ministeriales “llegaron con agresiones, golpearon y tiraron la puerta. Asustaron a mis nietos, gritaban. A mi hija la magullaron, apretaron su chichi, porque se opuso a que se llevaran a su papá. Pido justicia.
“A mí igual me trataron mal, me empujaron, me querían echar a la patrulla por querer defender a mi marido; me maltrataron”.
“¡Le apretaron el pescuezo!”
“Eran las 4:40, azotaron mi puerta: ‘¡Abre la puerta hijo de su puta madre!’”, relató a su vez la señora Alejandrina López Aquino sobre la detención de su esposo, Ricardo V., a quien los policías “¡le apretaron el pescuezo!”, después de ingresar a su casa con pasamontañas, tras romper el candado de la puerta principal.
“A mi hija la golpearon. Se colgó mi nena de 13 años a su papá. Y la otra de 11. Agarró un policía y la tiró. Mi hija está llorando, está sufriendo. Mi hija gritó. Todos los vecinos oyeron, pero nadie se asomó”, indicó.
Doña Alejandrina manifestó que las autoridades se negaron a darle la orden judicial, por lo que se la ‘arrancó’ a una funcionaria que acudió al cateo a su domicilio y se la metió entre su ropa, a la altura del pecho; “entonces un policía me pegó en mi espalda. Tengo adolorida mi espalda, pero no hay problema; me conformo porque se lo quite (el oficio del Juzgado de Tehuantepec), y estoy viendo que a mis compañeros a nadie se le dio.
“Hago responsable a esta señora (la funcionaria), y atrás de ella viene el mero Presidente: si me van a matar por mis hijas… pero está mi esposo. Y este problema no es de ahorita, viene de hace nueve meses, del dichoso terreno de los polos, porque ellos se quieren quedar con unas cosas y no quieren repartir nada al pueblo.
“Todo el pueblo estamos con el polo (de desarrollo). Pero no estamos de acuerdo que lo dan nada más a los de tierra (sic)”, dijo.
“Si algo me pasa a mí hago responsable a Enith Gutiérrez Jiménez, y al pinche Presidente, que se pasa de…”, advirtió.
“Nos apuntaron 5 policías”
Candelaria de la Cruz Jiménez denunció que en el caso de su papá, Orlando C. G., “llegaron a la casa de 4:00 a 4:30 de la mañana, golpearon la puerta como para tirarla. Mi mamá y yo nos despertamos, nos dio miedo porque nos imaginamos lo peor, ya que afuera se escuchaba: ‘¡Abran! ¡Abran!’.
“En eso escuchamos un golpe más fuerte, abrieron la puerta, con sus lámparas a los ojos nos estaban alumbrando. Vi la luz y sus armas, porque nos apuntaron a mi mamá y a mí, y nos dijeron que contra la pared, con las manos arriba.
“Nos preguntaron ‘dónde está, dónde está’. Les preguntamos que quién. Alcancé a prender la luz y vi que eran policías, porque tenían lo de ‘AEI’. Y nos seguían apuntando como cinco policías; los otros se iban para arriba cuando de afuera escuchamos ‘acá viene’; entonces nos soltaron a mi mamá y mí.
“Entonces pregunté por qué se llevaban a mi papá y les pregunté dónde está la orden de aprehensión, y nunca me enseñaron una orden de aprehensión”.
Comentó que su papá es diabético y se lo llevaron con una chancla.
“Sé que es por el polo”
La esposa de Armando S. G. refirió que a su casa llegaron una patrulla de la Policía estatal y una de la Guardia Nacional. “Hubo mucha agresión por parte de ellos. Así que también responsabilizo al Presidente y a la síndica municipal, porque su trabajo que están haciendo es de delincuencia, no como debe ser”.
“Sé que es también por el polo. Cuando el Presidente llegó con nosotros dijo que iba a apoyar al pueblo, y sin embargo está apoyando pero a los delincuentes. Así que necesito saber de mi esposo, dónde lo tienen, que lo traigan de regreso, y si se va a tratar de arreglar, porque él no robo nada, no hay pruebas sobre él”, dijo.
“¡Quiero justicia!”
Patricia Sánchez Castro, hermana de Ana Luisa S. C. y habitante de Tehuantepec, refirió: “Mi hermana vive sola, sus hijos trabajan fuera. En la mañana recibí una llamada de que a mi hermana se la llevaron. Fui al mediodía a Mixtequilla, a casa de mi hermana: encontré su portón golpeado, su puerta despedazada.
“Le hago un llamado al presidente, Juan Carlos: somos vecinos, paisanos, nos conocemos desde niños; estás para proteger a la ciudadanía, a los paisanos, no para hacer todo esto que mandaste a hacer; llevaste a los paisanos como vil delincuentes, cuando los delincuentes andan en la calle.
“¡Quiero justicia!, y que mi hermana aparezca con bien, sana; y todos los señores que llevaron, que aparezcan, porque no son delincuentes, son señores que trabajan”, dijo.
Las denunciantes indicaron que desde la mañana del sábado el pueblo se quedó sin señal de telefonía e internet, y que para comunicarse salieron a los pueblos cercanos, como la agencia de San Luis Rey, perteneciente a Tehuantepec, a cuya cabecera municipal decidieron venir a hablar con la prensa.
Candelaria de la Cruz expuso que después del mediodía alguien les informó que, tras su detención, sus familiares fueron trasladados directamente a la ciudad de Oaxaca.
Por el momento, expusieron las mixtecas, el edil García Salud “anda resguardado como por siete carros de la Guardia Nacional”.