Cineasta oaxaqueño en el Festival de Cannes 2024 

El cineasta oaxaqueño Juan Pablo Villalobos (Tehuantepec, Oaxaca-1988) participó en el Festival de Cannes  2024 que se realizó en la ciudad francesa de Cannes, en la Riviera Francesa, Provenza-Alpes-Costa Azul, del 14 al 25 de mayo de 2024.

Juan Pablo Villalobos fue seleccionado en 2023 en la Sección de Cortometraje Mexicano de Ficción del Festival Internacional de Cine de Morelia, con su cortometraje Xquipi (Ombligo) realizado en 2022 en su ciudad de origen y éste mismo le llevó a participar en Cannes, considerado el más importante de la industria europea del cine.

A su regreso a Tehuantepec, Oaxaca, nos enlazamos por medio de una videollamada para conversar y conocer sobre esta experiencia de compartir con cineastas, estrellas, profesionales de la industria cinematográfica: productores, distribuidores, vendedores internacionales, etc. El joven cineasta accede amablemente. Aquí compartimos parte de la conversación.

Muchas gracias por este tiempo para la entrevista. Juan Pablo, cuéntanos ¿Cómo llegaste a Cannes?

Cannes es un festival muy grande, el más importante en el mundo del cine y aparte de su selección oficial, en la que compiten 15 películas  para la palma de  oro,  tienen dos  secciones paralelas que también son muy antiguas, una es La Quincena de Realizadores y la otra selección es la Semana de la Crítica, ambas son paralelas. En toda la bahía suceden estos tres eventos. La Semana de la Crítica, a su vez,  selecciona las películas que participarán en su programa y entre estas hace una selección del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) como invitado especial. 

Es ahí donde entró el cineasta oaxaqueño con su cortometraje Xquipi (Ombligo) junto a otros dos cortos mexicanos: Extinción de la especie, de Nicolasa Ruiz y Ha, corto dirigido y escrito por María Almendra Castro.

Tu  cortometraje fue seleccionado en 2023 como el mejor cortometraje de ficción mexicano en el FICM ¿Cómo te fue ahora en Europa?

Me fue bien porque  fui desde el inicio del festival y pude ver  muchas películas de la competencia oficial de Cannes; es muy interesante porque es la primera vez que se proyectan en el mundo y hay una expectativa grande  a las películas,  todos o la mayoría de  los críticos del mundo van, los productores, distribuidores, si es el evento más importante del cine. Eso para alguien que está empezando es algo muy abrumador e interesante porque  empezamos a conocer cómo se desarrollan las películas en los festivales, cómo se trabaja con los productores, con las distribuidoras,  que nos permite orientarnos para saber cómo empezar o hacia dónde ir .

Xquipi (Ombligo) es mi segunda producción, empezó en 2022 sin ninguna pretensión de participar en festivales y de repente estar en Cannes representa todo un panorama para saber qué puertas tocar. 

¿Cómo te sentiste frente a todos estos realizadores, cómo veías tu película?

Dimensionando el contexto. Lo motiva a uno estar ahí, participando en la selección oficial, pero también se puede ver la superficie del cine: las alfombras rojas, las limusinas, el glamour que el cine provocó sobre todo en el siglo XX. También es eso, se siente cierta decadencia, el cine ya no es aquel de Marcello Mastroianni, Sofia Loren o Alain Delon. Eso es Cannes, es la Costa Azul de los europeos ricos, la opulencia, el vino, los smokings, la alfombra roja en la playa. Todavía se ve, pero ya no es el cine de los 50, ya no es el mismo. Hoy está acaparado por producciones de superhéroes y de tercera dimensión y el cine que se ve muy poco en las pantallas, que ya no vende, pero está sujeto a ese glamour.  

Cannes, dice el cineasta oaxaqueño, vive un poco de nostalgia, se quiere incluir poco a poco el que se estrene una película como Mad Max (la última) para abrir el festival.  Están un poco en la incertidumbre de hacia dónde se va Cannes, si priorizar a los autores o si se va a empezar a premiar a los que están haciendo millonarios a las distribuidoras.

Aunque, reitera, sigue siendo el glamour y eso para una persona de Tehuantepec, que hizo su corto con 100 mil pesos, es una perspectiva  hasta “delirante”, absurda, pensé cómo es que estoy ahí en una pantalla, qué  va a pasar con el cine que yo hago.

Juan Pablo adelantó que ya hay otro festival que le invitó a participar en septiembre de este año, pero prefirió reservar por ahora el nombre hasta que se haga oficial. Aunque sí mencionó que esta semana participará en el Festival Internacional de Cine UNAM (FICUNAM) un evento de promoción cinematográfica que presenta una selección de programas de cine contemporáneo.

En FICUNAM su corto está seleccionado en Ahora México, una sección de películas mexicanas; Xquipi es el único cortometraje compitiendo con otras siete películas o largometrajes.

¿Qué representa eso para ti?

Quizá no es el festival más conocido mundialmente, pero para mí, sí es el reto más importante al que va a estar sometida la película, porque es el festival de temas  de vanguardia cinematográfica en México, donde seleccionan producciones que tienen una apuesta en la  exploración formal. “Es como una apuesta hacia un cine experimental, no narrativo, y el que Xquipi esté ahí para mi es muy importante”.