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Lii Yio es una mujer oaxaqueña que, incluso en su nombre lleva las raíces chinantecas que corren por sus venas, su papá, Zeferino Pérez, decidió ponerle Flor Bonita en su lengua nativa.
Desde pequeña ha sido testigo de muchas cosas que actualmente la definen y por las que trabaja: sus raíces oaxaqueña, la discapacidad y la búsqueda de la justicia.
Esto la ha llevado a ser candidata a magistrada en materias Penal y del Trabajo por el 13vo circuito en estas elecciones del Poder Judicial que se llevarán a cabo el primero de junio de 2025.
En una historieta de vida que recientemente publicó en sus redes sociales comparte que estudió dos carreras universitarias al mismo tiempo: Derecho y Educación Especial, temas que ha sabido combinar o la vida la ha llevado a combinar de una forma satisfactoria.
La candidata nos comparte que como toda niña de los 90, quería ser doctora o profesora, esta última profesión que sus padres, Lorenza Zárate y Zeferino Pérez desempeñaron por muchos años.
Sin embargo, el divorcio de sus padres y los procesos legales que llevaron durante su adolescencia, la hizo decidirse por estudiar Derecho, para poder garantizar un mejor servicio a quienes en un futuro estuvieran en esta situación, principalmente las mujeres.
“Conocí por primera vez un juzgado de lo familiar y con ello, todas las dinámicas que se viven dentro de estos, el no tener un acompañamiento directo a cada una de las personas, que inclusive no se viera por esta perspectiva de niñez, de adolescencia o esa perspectiva de género, porque en el caso pues específico pues sí había muchas vulneraciones”, recuerda.
Lii tiene dos hermanos, Tania, 13 años mayor que ella, y Eli, quien tiene una discapacidad múltiple, él es la razón por la que decidió estudiar Educación Especial. Lii Yio confiesa que iba a ser sólo un ciclo escolar, pero terminó la licenciatura de manera satisfactoria.
Expone que ninguna secundaria quería aceptar a su hermano, por lo que ella decidió inscribirse a la Escuela Normal de Educación Especial (ENEE) con el fin de saber a dónde podían ayudarle.
“Qué desperdicio”
Por las mañanas, Lii Yio iba a la ENEE, salía a las 2 de la tarde y de inmediato corría a la Universidad Anáhuac para sus clases de Derecho, llegaba a su casa por la noche, comía un poco y hacía sus tareas.
Muchas personas sabían de esta dinámica, incluso profesores, entre ellos uno que la llenó de elogios por esta decisión; sin embargo, cuando supo que combinaba Derecho con Educación Especial, dijo estar “muy decepcionado” de la decisión de Lii e incluso señaló que era un desperdicio.
“Me preguntó qué estudias, criminología, criminalística… o por lo menos contabilidad, ciencias políticas para que después te desempeñes en un área especializada del derecho. Le dije que no, que estudiaba educación especial”.
Ante su respuesta el profesor le dijo «Pero eso ¿para qué te va a servir? Qué desperdicio”.
La candidata recuerda que se sintió vulnerable e incluso se comenzó a replantear la decisión, a preguntarse si de verdad esa “combinación” le iba a servir, pero el tiempo se encargaría de darle la respuesta.
Brindar certeza jurídica las PCD

La primera ocasión en la que Lii Yio “combinó” el Derecho y la Educación Especial fue en su tercer semestre, cuando se acercó a hacer prácticas con la comunidad sorda oaxaqueña, quien le expuso la incertidumbre jurídica en la que vivían.
Recuerda que estas preguntas comenzaban desde el trámite de un acta de nacimiento, cuestiones con sus datos, pagar predial o cualquier acto jurídico, por lo que ella les fue asesorando y observando la falta de información que existe.
“Desde ahí empecé mi labor; estar viendo e impulsando que pudieran tener la información necesaria. Inclusive iniciando mis primeros acompañamientos con las comunidades de personas con discapacidad”, rememora.
Lii-Yio comparte que su primer trabajo fue en el DIF Municipal de Oaxaca de Juárez donde fue asesora jurídica y por ello llegaron sus amistades de la comunidad sorda para solicitarle apoyo para crear sus asociaciones civiles de manera legal.
Además de este grupo de personas, llegaban comúnmente personas adultas mayores quienes solicitaban su apoyo, algunas denunciaban que los querían sacar de su casa, que sus familiares no los alimentaban, por lo que ella iba a mediar la situación a sus hogares.
“Eran aspectos en los cuales en primera, identifiqué que la población debe ser escuchada y que a partir de eso, puedes resolver distintos conflictos, pero es necesario saber el contexto, sí o sí. Eso es lo que me ha enseñado. Y también muchos casos que involucraban a niñas, niños y adolescentes”, recuerda.
Primera procuradora y procuraduría
Lii recuerda que en 2015, mientras ella era jurídica, se publicó la Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y se imponía a todos los estados crear procuradurías especializadas para niñas y niños.
Ella le comentó esa situación a sus superiores, quienes le depositaron su confianza para la creación de esa institución y para ser la titular de la primera Procuraduría Municipal de Niñas, Niños y Adolescentes en el país.
Eso le abrió las puertas a proyectos más grandes. Era un referente a nivel nacional y la invitaron a crear esta misma procuraduría a nivel estatal. Sin embargo, debido a que tenía menos de 35 años, no podía ser la titular, por lo que asumió el cargo de subprocuradora donde tuvo un gran equipo y se empapó de más conocimientos.
Fue en la procuraduría estatal donde comenzó a trabajar en las primeras declaraciones bajo procesos redignificantes, ya que por mucho tiempo las víctimas han pasado por procesos de revictimización.
Declaraciones lúdicas

La candidata a magistrada lamenta que muchas veces se revictimice a las personas, sobre todo niñas, niños y adolescentes, por lo que ella buscó que al estar en un proceso jurídico, no fuera tan intimidante, inaccesible o innetendible.
“La primera vez que llevé a un niño o una niña a declarar, me dolió muchísimo porque vi a esa niña en un estrado, le estaban preguntando de manera directa y además con un lenguaje jurídico que solamente los abogados entendíamos, era una chiquilla que, además, tenía 15 años con discapacidad intelectual”, recuerda.
En esa ocasión se preguntó qué hacer para que la situación no se repita e implementó los ajustes para que las personas pudieran allegarse de esta información.Ya los había utilizado en el ámbito de la educación especial, solo confirmó que se pudieran utilizar en el área jurídica.
“Me di cuenta que en el mundo jurídico, lamentablemente lo veían como un artículo, pero nadie lo comprendía. visión me la dio la educación especial”, menciona.
Explica que esta consiste en que la jueza baje del estrado e interactúe de manera directa con la víctima de delito, pues necesita sentirse escuchada. Colocó tapetes de colores en el piso de la sala, llevó personal especializado, una psicóloga especialista en niñas niños y adolescentes que podía adecuar las preguntas, todas esas formales que hacemos los abogados, pero en un lenguaje sencillo y claro para que comprendiera el niño o la niña.
Esto se volvió interesante y fue reconocido por muchas personas e instituciones, quienes buscaron a la abogada y profesora para que brindara cursos y talleres y así poder tener una justicia más accesible y humana.
Recuerda que también ha utilizado imágenes, dibujos, plastilina, muñequitos para que personas con discapacidad auditiva, pero que no saben Lengua de Señas Mexicana, puedan describir el delito del que fueron víctimas, lo cual llevó a que sentenciaran a una persona, quien incluso aseguró que cometió el abuso porque pensó que ella no podría defenderse ni comentar lo sucedido.
Tres propuestas
La candidata tiene tres propuestas que forman parte de su eslogan: una justicia Accesible, Cercana y Humana, para ella importa que en todo momento se escuche a la gente.
Asegura que además de saber escuchar, es importante que esa escucha sea tomada en cuenta.
“No es escuchar por escuchar. Ni tampoco escuchar significa solo activar tu sentido del oído. Es poner una real atención a las problemáticas que están pasando”.
Lii-Yio Pérez Zárate es candidata a magistrada en materia Penal y del Trabajo por el 13º circuito.