Crece acoso a radios comunitarias y defensores de derechos humanos en el Istmo

°  Imparte Unitierra taller sobre protocolos de seguridad para radios comunitarias

Redacción/

A un mes de que Radio Totopo acusara a los gobiernos estatal y municipal de un atentado a sus instalaciones a finales de marzo, este fin de semana denunciaron que sus integrantes fueron amenazados de muerte y sufren acoso policíaco. A través de un comunicado la radio comunitaria juchiteca responsabilizó al gobernador del estado Gabino Cué Monteagudo y a las empresas Unión Fenosa Gas Natural, Mareña Renovables, Macquaire, PGGM, Mitsubishi y al Banco Interamericano de Desarrollo, entre otras.

Las personas amenazadas de muerte por medio de un anónimo son el coordinador de la radio comunitaria, Carlos Sánchez Martínez, y Sara Bartolo, Miguel López y Rogelio Martínez, quienes colaboran en la misma.

“sr miguel ya sabe usted en que lio se metió usted ustes y carlos y sara carlos se cree muy becxe y ahora aténganse a las consecuencias alejen se de hay por qué no saben lo que les espera sino les voy adar donde mas les duela y también tu primo rogelio avísalo porque ustedes no saben de que soy capas, esto nada mas en un aviso”, dice la nota.

Creada en 2006 para “difundir y denunciar” el Plan Puebla-Panamá, Radio Totopo ha se ha caracterizado por divulgar las movilizaciones campesinas en contra de los proyectos eólicos que se están implementado en el Itsmo de Tehuantepec.

En este contexto, la Universidad de la Tierra (Unitierra) imparte hoy un taller sobre protocolos de seguridad para radios comunitarias indígenas, donde se abordarán las nociones básicas de seguridad y autoprotección, legales e identificación de riesgos, impartido por miembros de la Red de radios comunitarias-Amarc México.

Detectar los intereses afectados por la labor de las radios comunitarias para establecer organizaciones y personas aliadas, enemigas y neutras, es uno de principios básicos del protocolo de seguridad que deben seguir las personas que colaboran en tales medios de comunicación tras recibir amenazas y hostigamiento como resultado de su trabajo.

Asimismo, se debe realizar una bitácora en la que sea noten los incidentes, actuar de manera conjunta con otras organizaciones en contra de las amenazas y, en el último de los casos, ponerse a salvo de éstas.