Soledad Jarquín Edgar
El síndico municipal Adolfo Longinos Martínez y el regidor de Hacienda Damián Longinos Martínez tomaron la carretera 190 a la altura del municipio de Zapotitlán Palmas, ubicado en la mixteca oaxaqueña, para descalificar de nueva cuenta a la presidenta municipal Irma Martínez Reyes contra quien han ejercido violencia política en razón de género.
En julio pasado el Tribunal Electoral del Estado de Oaxaca (TEEO) resolvió un procedimiento especial sancionar por violencia política en razón de género cometida contra la munícipe Irma Martínez Reyes, quien fue elegida por la población durante una asamblea por el sistema normativo interno en 2022 para el periodo 2023-2025.
A pesar de eso, el síndico y el regidor siguen obstruyendo su mandato. El problema no ha sido resuelto ni por la Secretaría de Gobierno ni por el Congreso local y otras instancias gubernamentales involucradas, pese a las veces que la munícipe ha acudido a reuniones, “basta con que él y todos los que lleva, se paren y se vayan para dar por terminada la mesa de trabajo”, tal parece que ni las autoridades estatales saben qué tienen que hacer, declaró.
Son las mismas personas que desde diciembre pasado mantienen tomado el palacio municipal para exigir la renuncia de la primera mujer en asumir la presidencia municipal, explica en entrevista la regidora Elodia López Martínez, acompañada de los integrantes del Cabildo, quienes responsabilizan al síndico y al regidor de cualquier cosa que pudiera suceder en las próximas horas.
Por ello, el Cabildo de Zapotitlán Palmas llamó, otra vez, a las autoridades del gobierno de Oaxaca para que atiendan su reclamo y se resuelva el problema, aunque al síndico y al regidor de Hacienda no les interese ser gobernados ni tener que consultar a una mujer, ella es la autoridad, dice la regidora.
El temor de las autoridades que trabajan desde la casa de la presidenta municipal, es que la violencia va creciendo, debido a que los señores inconformes involucraron a una organización de Huajuapan denominado Frente Nacional Indígena y Campesino que, entre otras cosas, aglutina a un grupo de taxistas, que nada tienen que ver con la comunidad y que son conocidos por hechos de violencia.
Con el cierre de la carretera no sólo están violando los derechos al libre tránsito sino también el derecho a la educación de la niñez de esta población, así como de Santa María Ayú y de Ahuehuetitlán de González, ya que el personal docente de las tres poblaciones no pudo pasar, afectando a niñas y niños y adolescentes que asisten a la escuela, desde el jardín de niños hasta el bachillerato.
También se impidió el paso al personal médico y de enfermería de la Clínica de Salud de la población, su objetivo es seguir presionando a las autoridades del Estado para que desconozca a la munícipe, explican las autoridades.
Nadie se esperaba que ganara una mujer
En el proceso electoral de 2022 nadie se esperaba que Irma Martínez Reyes ganara el proceso en el que compitió contra cinco hombres, entre ellos Luis Adolfo Longinos Martínez, quien está molesto desde entonces y ha emprendido una campaña de desprestigio y actos de violencia digital a través de cuentas de Facebook manejadas con nombres falsos, además de tomar el edificio de la presidencia desde el 17 de diciembre pasado.
Los primos Longino Martínez habían renunciado a sus cargos ante la incomodidad de que una mujer dirigiera los destinos del pueblo y no hicieran lo que ellos querían. El síndico pretendió presionar a la munícipe solicitando la compra de un celular para su uso personal con dinero de las arcas públicas.
También quería que el grupo de transportistas al que pertenece se encargara de transportar el material de las obras que se desarrollan en la comunidad, pero la empresa constructora contrató a otra y eso le molestó mucho, por lo que inició una campaña asegurando que la munícipe “se había embolsado” varios miles de pesos.
Por su parte, el regidor de Hacienda demandó un aumento de sueldo, “sin que se enteraran el resto de los integrantes del órgano de gobierno”. En ambos casos la presidenta Irma Reyes Martínez se negó, por lo que, primero, amenazaron con renunciar y luego con tomar el palacio municipal que mantienen cerrado desde diciembre pasado, ante la evidente indiferencia de las autoridades del Estado.
Cuando los Longino Martínez fueron llamados ante el IEEPCO para que ratificaran su renuncia ya no quisieron, argumentando que lo harían si todo el cabildo renunciaba, “pero nosotros si queremos cumplir con la tarea para la que fuimos electas”, dicen la Presidenta y la Regidora.
Incluso, hay testimonios videogrados y de personas que muestran cómo ambas personas violentaron una asamblea que puso en riesgo a la Presidenta y a otras y otros integrantes del cabildo, que tuvieron que ser protegidas por mujeres del pueblo y la policía municipal, provocaron una trifulca. En otra ocasión, el regidor de Hacienda recibió una llamada de atención de parte de otros pobladores por ejercer violencia verbal contra la presidenta municipal.
A su vez, la regidora Elodia López Martínez explicó que recientemente un grupo de hombres “muy borrachos” la siguieron a su casa, además de que el síndico le ofreció 20 mil pesos para que traicionara a la Presidenta, “yo le dije pensé que aprendería mucho de usted, que es una persona mayor, pero lo que me está enseñando es a ser corrupta”, le respondió.