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Este miércoles se cumplió un año de la desaparición de la defensora Sandra Domínguez. La noticia cambió la vida de una familia que hoy a un año de su desaparición, denuncia que nuevamente ha sido víctima de robo e intimidaciones.
“Justo cuando intentamos movilizar acciones para recordarla y exigir justicia. No lo vemos como coincidencia, sino como un reflejo de que el miedo sigue siendo su herramienta preferida”
Kenia y Kisha Domínguez, hermanas de Sandra y su madre Aracely Martínez escribieron una carta para recordar a la abogada y defensora ayuuk, en donde describen lo que ocurrió ese 8 de octubre de 2024 cuando supieron de su desaparición.
Afirman que lo que le ocurrió a Sandra no fue un hecho aislado, fue el resultado de un sistema que permite, encubre y muchas veces perpetúa la violencia.
La noticia que nos heló el corazón: nos avisaron que no respondías. Intentamos comunicarnos contigo; tu teléfono aún tenía señal, pero ya no contestabas. Mamá comenzó a angustiarse y todos sentimos cómo un hueco se iba abriendo en el estómago. Buscamos la forma de ir a buscarte. Fue ahí donde todo comenzó.
La Fiscalía de Oaxaca emitió una ficha de búsqueda. La familia de la defensora —que denunció violencia de género y ciberacoso de parte del coordinador estatal de Delegados por la Paz del gobierno del estado de Oaxaca, Donato Vargas Jiménez— recuerda que comenzaron a movilizarse y a exigir su aparición, sin imaginar el desenlace. Su búsqueda, señalan, fue una lucha larga y dolorosa, en la que vivieron intimidaciones, persecuciones y amenazas.
La vida para nuestra familia y para las personas que te conocieron nunca volvió a ser igual. Logramos que volvieras a casa. Quizá no como queríamos pero logramos presionar para que te encontraran.
Hermanas Kisha y Kenia Domínguez, y su madre Aracely Martínez
El cuerpo de Sandra Domínguez y su pareja, fueron encontrados en una fosa en Unión Progreso Tatahuicapa, Veracruz el 28 de abril de este año. Más de 200 días después de su desaparición.
Antes, el 29 de enero de este mismo año, cuatro personas murieron en un enfrentamiento armado en el rancho “El Capricho”, en Nazareno, Sochiapan, Veracruz: un agente federal del grupo antisecuestros y tres de los presuntos responsables de la desaparición de Sandra.
Cruz Esmeralda M. R., una expolicía vial, fue detenida, en la agencia municipal de Francisco Villa, de Santiago Yaveo, como una de las personas implicadas en la desaparición de la defensora y posteriormente trasladada en prisión preventiva al penal de Tanivet, Oaxaca.
La madre y hermanas de Sandra Domínguez consideran que en un estado donde se protege a violentadores, donde la desaparición de personas y los feminicidios van en aumento, donde se criminaliza la protesta y se persigue a quienes luchan, a Sandra la quisieron silenciar.
Para la familia Ayuuk, el caso de Sandra no es la excepción: “Es el espejo de una realidad sistémica que nos duele todos los días. Pero también es un llamado a no ceder, a seguir nombrando, exigiendo, recordando. Sembraron un eco que ya no pueden detener”.

